domingo, 12 de junio de 2011

Inevitabilidad de la Evolución

Nonzero es un libro de Robert Wright (Te Moral Animal) que plantea que hay un progreso en la evolución, un avance hacia más cooperación y más bien. Incluso insinúa que Dios es el punto omega , el final de la evolución,no el principio.
Pero no es de eso de lo que quiero hablar en esta entrada sino de la inevitabilidad de algunos “inventos” de la evolución.
Wright explica por ejemplo que el ojo se ha descubierto independientemente una docena de veces o más, la multicelularidad mas de 10,etc. Es decir, que muchas cosas aunque nos parece que la Evolución hace cosas improbables o de chiripa, en realidad son inevitables. El ojo estaba destinado a ser inventado y reinventado y si empezara de nuevo la evolución volvería a aparecer, contrariamente a lo que decía Gould de que si se volviera a repetir la evolución ocurriría algo diferente. En realidad muchas cosas volverían a ocurrir aunque no fueran exactamente iguales
Por un lado esto depende del mundo físico. El ojo se reintenta porque la luz es un medio excelente para percibir. Los animales que vivieran en arboles volverían a descubrir el pulgar porque agarraras a las ramas seria casi inevitable.
El vuelo es otro ejemplo. El vuelo se ha “inventado” varias veces: en insectos, en aves, en mamíferos como el murciélago…Y se inventa porque existe el aire. En realidad la Selección Natural no “inventa”sino que descubre las leyes físicas que están hay fuera, como las leyes del vuelo. En el medio acuático ocurre lo mismo. Los delfines por ejemplo convergen en su forma adaptada al agua porque si quieres nadar en el agua hay leyes que favorecen unas formas con respecto a otras.
Otros “inventos” no dependen del mundo físico, sino del mundo social, del hecho de convivir con otros individuos de la especie. El altruismo reciproco volvería a aparecer porque al convivir en grupo seria inevitable cooperar y no estar peleando continuamente, al igual que las jerarquías,etc. Estos avances son maneras de evitar una disminución de la transmisión de genes. Los que no los inventaron desaparecieron.
Y lo mismo ocurriría con la inteligencia, la percepción y la información no valen de nada sin capacidad de procesamiento y la evolución ha diseñado inteligencia desde el principio y la ha ido aumentando y cambiando. Entre seres sociales acabaría apareciendo una inteligencia no igual pero con elementos comunes a la nuestra
La evolución es mas inevitable de lo que parece

5 comentarios:

Anónimo dijo...

Estoy completamente de acuerdo. Creo que un punto de vista directamente extraíble de la teoría de la evolución nos lleva hacia este planteamiento.
Si la teoría del caos nos habla de la necesidad de una capacidad de procesamiento de información ilimitada para el correcto procesamiento de una infinitud de variables ambientales a tener en cuenta cuando estudiamos alguna temática del mundo, creo correctos tanto el punto de vista según el cual el mundo es una infinidad de casualidades a las cuales intentamos comprender para establecer un orden que nos dé sentido de existencia (el cual no existiría), como el que predice la existencia de un plan divino que nos remita a una evolución permanente hasta alcanzar esa perfección en sí misma y nos ponga en contacto con aquél a quien denominamos Dios.
(http://ubipsyc.blogspot.com.es/2013/03/sobre-la-idea-de-perfeccion-y-dios.html)

Ricardo Mena dijo...

Dawkins descubrió lo que él llama "the evolution of evolvability."
Creo que lo explica en su tercer (de cuatro) gran libro The Blind Watchmaker.

Saurus dijo...
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
Saurus dijo...

" Y lo mismo ocurriría con la inteligencia, la percepción y la información no valen de nada sin capacidad de procesamiento y la evolución ha diseñado inteligencia desde el principio y la ha ido aumentando y cambiando. Entre seres sociales acabaría apareciendo una inteligencia no igual pero con elementos comunes a la nuestra. La evolución es mas inevitable de lo que parece. "

Me gustaría conocer como podría llegar a ser la inteligencia evolucionada de un calamar o pulpo terrestre; si pudiese sobrevivir fuera del agua. Hasta donde podría llegar, a diferencia de los seres humanos ( el cerebro de un calamar, esta más emparentado a la de los caracoles) . O la de un insectoide inteligente.

Hubo un ave, el Trodon, que podría haber evolucionado a una forma humanoide, a la que llamaron homo saurus. ( especulación científica, o ucronia, muy interesante)

Un saludo.

Saurus dijo...

He visto un artículo interesante, especulativo, sobre evolución de los dinosaurios, de haber continuado estos. https://www.levante-emv.com/tendencias21/2022/11/25/vivieran-hoy-dinosaurios-habrian-evolucionado-79116190.html

" Longrich sostiene que, a partir del Jurásico, los dinosaurios saurópodos, brontosaurios y sus parientes evolucionaron hasta convertirse en gigantes de 30 a 50 toneladas de peso y hasta 30 metros de largo: tenían diez veces el peso de un elefante y eran tan largos como una ballena azul. Esto sucedió en diferentes continentes, en distintas épocas y en múltiples climas y ambientes: sin embargo, otros dinosaurios que vivían en estos entornos no se convirtieron en supergigantes.

A pesar de esto, todas las variedades de dinosaurios no lograron evolucionar como los primates y los humanos: todos eran saurópodos, por lo tanto algo en la anatomía de los saurópodos desbloqueó su potencial evolutivo. Les permitió crecer de una manera que ningún animal terrestre había hecho antes, o incluso lo ha hecho desde entonces, pero siempre con cerebros pequeños y escasamente desarrollados.

Por el contrario, los mamíferos tenían diferentes limitaciones. Nunca evolucionaron como herbívoros y carnívoros supergigantes. Pero en repetidas ocasiones desarrollaron grandes cerebros, en especies tan diferentes como orcas, cachalotes, ballenas barbadas, elefantes, focas leopardo y simios. A pesar de esto, solo los primates, y principalmente después los homínidos, lograron crear las condiciones para que esos grandes cerebros permitieran un desarrollo cognitivo superior.

Según Russell y Séguin, el Troodon, de no haberse producido la gran extinción, hubiera incrementado su inteligencia, mejorando asimismo las posibilidades de su visión estereoscópica. Este proceso evolutivo habría conducido a la existencia de un “dinosauroide”. De acuerdo a esta hipótesis, el dinosaurio habría evolucionado hasta desarrollar un cerebro más grande, adoptando la postura erecta y acortando el cuello, para soportar mejor el peso.

Al erguirse, ya no necesitaría la cola para equilibrarse y la perdería, como ocurrió con determinados primates. Para soportar la nueva postura, el tobillo descendería y el pie se volvería más largo y plano. A partir de todos estos cambios, el antiguo Troodon habría comenzado a experimentar con la fabricación de herramientas, el camino inicial que llevó a la humanidad a su gran desarrollo cognitivo y cultural.

Sin embargo, aunque Longrich cree que es probable que el dinosaurio habría modificado en parte su cuerpo y que, dadas sus características, seguiría dominando todo el planeta, no existen las condiciones evolutivas para pensar en un desarrollo de su cerebro.

Al parecer, solo en África la evolución de los primates tomó una dirección única. Algo en la fauna, la flora o la geografía de África impulsó la evolución de los simios, caracterizándose como primates terrestres, de cuerpo grande, cerebro de amplias dimensiones en relación con su cuerpo y que usaban herramientas. Esa evolución derivó en los seres humanos, que luego se desperdigaron por todo el planeta.

De esta manera, Longrich cree que la evolución humana fue posible por la combinación de dos factores: el “punto de partida” caracterizado por un cerebro más grande en los mamíferos, y las condiciones únicas que se dieron en África para su posterior evolución cognitiva. Los dinosaurios, en cambio, no contaban con el “punto de partida” y, en consecuencia, difícilmente solo un contexto ambiental positivo les habría permitido desarrollar su cerebro. "