viernes, 6 de septiembre de 2013

Sexo al Amanecer versus Sexo al Anochecer



Debemos abandonar la noción de que la mujer es simplemente un hombre reprimido esperando a ser liberado
-Donald Symons, The evolution of Human Sexuality

Me compré los libros Sex at Dawn (Sexo al Amanecer) y Sex at Dusk (Sexo al Anochecer) sin saber mucho acerca de ellos pensando simplemente que eran libros sobre sexo y evolución, un tema sobre el que leo regularmente. Sex at Dawn es un impresentable folletín sin pies ni cabeza escrito por  Christopher Ryan, psicólogo, y Cacilda Jethá, psiquiatra, aunque deduzco que la autoría real del libro es de Christopher, y Cacilda aparece para suavizar y modernizar el toque machista del libro. Sex at Dusk es una réplica a Sex at Dawn escrita -para desmantelar todos los peregrinos argumentos de Ryan y Jethá- por una misteriosa Lynn Saxon, de la que no he encontrado prácticamente nada en Google. No tiene perfil en Wikipedia, no ha escrito otros libros y no aparecen otros artículos y trabajos de ella. Digo que es una autora misteriosa porque el libro es buenísimo pero está publicado por una plataforma independiente, y el nivel de documentación en primatología y antropología es excelente por lo que tiene que ser una persona bien formada en biología evolucionista. He encontrado cosas que no había visto en otros libros y , como os decía, os puedo asegurar que he leído bastante sobre sexo y evolución.

Sex at Dawn parte de una agenda ideológica y distorsiona, como demuestra Saxon, toda la evidencia que toca. El objetivo del libro es combatir la monogamia occidental impuesta por la agricultura y volver a la sexualidad primitiva y original del ser humano cazador-recolector que, según ellos, es el sexo indiscriminado de todos con todos, todas las mujeres con todos los hombres. Dice burradas evolucionistas como que los celos no existen, son inculcados, y que la preocupación por la paternidad no tiene sentido y es otro invento. Nuestra sexualidad original es como la de los bonobos, y las mujeres son hipersexuales y están deseando acostarse continuamente con todo hombre que se les acerque. Los cazadores recolectores vivían en sociedades igualitarias donde se compartía todo, incluido el sexo. Por supuesto, ha sido un best-seller en ventas en USA. Yo no he podido pasar del segundo capítulo.

Christopher Ryan y Cacilda Jethá
Sex at Dawn pretende combatir la “Narrativa estándar” sobre sexo y evolución, no da nombres pero se refiere a autores como David Buss, que según Ryan y Jethá defienden que el ser humano es monógamo. No merece la pena rebatir todas las tonterías que dice, empezando porque la narrativa estándar en ningún momento plantea que el ser humano sea monógamo. Solo hay que leer a Helen Fisher y otros autores para darse cuenta que todos reconocen una monogamia imperfecta, seriada, con mucha relación extramatrimonial en sociedades de cazadores-recolectores. Y también reconocen que el sistema económico que trajo la agricultura presionó hacia la monogamia (ver Anatomía del Amor de Helen Fisher, por ejemplo).

Pero lo que no se puede decir es que la paternidad sólo empezó a importar con la agricultura o que los celos son culturales. Porque la paternidad importa desde los animales inferiores, y los celos existen también en animales inferiores. Cuando cantidad de animales machos muestran la conducta llamada mate guarding, de proteger a su hembra del acceso a otros machos, o cuando un león o lemur mata a la camada del macho alfa anterior es porque quiere él ser el padre de los hijos de esas hembras y no que lo sean otros. Si resulta que el ser humano es ajeno a todo eso tendríamos que explicar desde cuándo y cómo se produjo esa transformación.
mate guarding

Cuando estamos ante cualquier fenómeno o conducta humana que queramos estudiar lo primero que tenemos que plantearnos es: ¿existe ese fenómeno en los animales? Es lo que Robert Sapolsky, con su humor característico, llama el Precedente Filogenético. Porque si otras especies -sobre todo especies relacionadas- lo hacen, eso debilita mucho el argumento de que ese fenómeno pueda ser cultural. Cuenta Sapolsky en su libro “Por qué las cebras no tienen úlceras” que una vez leyó un texto donde la autora decía que en realidad no nos gusta que nos hagan cosquillas, que las cosquillas tratan del control por parte del que hace cosquillas, que la risa no es agradable sino que es refleja, que pedir que te hagan cosquillas es un gesto de subordinación y de gusto por las cadenas, y a continuación aparecían términos como falocéntrico y demás. Entonces Sapolsky se pregunta si los animales tienen cosquillas y nos informa que sí, que los chimpancés adoran que les hagan cosquillas. Una de las primeras palabras que utilizan los chimpancés que aprenden el lenguaje americano de signos es precisamente “cosquillas” y una de las primeras frases que forman es “hazme cosquillas”. Sapolsky trabajó con uno de ellos y cuando le hacía cosquillas el animal se retorcía, gritaba y se ponía como loco. Paraba, el chimpancé se sentaba, recuperaba el aliento y al de poco le volvía a decir: “hazme cosquillas”.
mate guarding

No se puede escribir  un libro sobre sexo y evolución sin conocer la Teoría de la inversión parental de Trivers. Ryan y Jethá dicen que la preocupación por la paternidad no existe en bonobos pero es que los bonobos macho no realizan inversión paternal. Importa la paternidad cuando vas a dedicar esfuerzo y tiempo a unos hijos que podrían no ser tuyos. Cuando la única aportación paterna es el semen no hay inversión paterna de la que preocuparse. 

También es vergonzosa la utilización de información sobre el sexo en otras culturas. Ryan y Jethá suelen contar el dato que les interesa de una cultura y se olvidan de lo demás. Una de las cosas que hace Saxon es ir a las mismas fuentes que citan Ryan y Jethá y leer todo el texto, y el panorama que resulta es muy distinto al que nos quieren hacer creer Ryan y Jethá. Por poner un ejemplo, Ryan y Jethá cuentan que según Willian Davenport, que vivió con unos  melanesios en los años 60, estos isleños evitaban el aburrimiento sexual permitiendo a los hombres que tuvieran amantes jóvenes y que a las esposas esto no les importaba y que lo veían como un signo de estatus. Resulta que te lees el resto del libro de Davenport y lo que cuenta es que a los hombre más mayores y ricos les estaba abierta la posibilidad de comprar una concubina, importada de otras islas. Estas concubinas eran my caras, 10 veces más que una esposa y a veces, dado el coste, la compraban entre varios hombres, aunque uno de ellos retenía la autoridad y decidía cómo se utilizaba la chica. El estatus de la concubina era el de una esclava doméstica, no tenía autoridad sobre los hijos que diera a luz y podía ser vendida y asesinada. También era una prostituta que podía ser alquilada por noches al resto de los hombres. En fin, nada que ver con el idílico mundo de amor libre que nos quieren pintar Ryan y Jethá.

Ryan y Jethá  no hablan prácticamente de hijos en el libro, su postura que es que el sexo es un placer, algo muy natural y sano y cosas de ese estilo. Se olvidan de que el sexo da lugar a los hijos y que esa es la causa por la que en todas las culturas se ha tomado el sexo como un asunto muy serio, y existen normas sobre cuándo cómo y con quién se hace el sexo. Tampoco los costes de las relaciones sexuales  son iguales para el hombre que  para la mujer. Como dice Saxon el ADN va en un sentido solo -del hombre a la mujer- que es la que tiene luego que enfrentar un embarazo, una crianza, etc. Y eso no se puede compartir. Todos los despropósitos los desmonta y explica muy bien Saxon en Sex at Dusk, pero imaginemos por un momento la situación de amor libre ideal de Ryan y Jethá. Todos los hombres tienen acceso a todas las mujeres y viceversa. ¿Suponen Ryan y Jethá que todas las mujeres son igual de atractivas para los hombres, o todos los hombres igual de atractivos para las mujeres? Entre una menopáusica y una chica joven está claro que el hombre va a preferir a la chica joven. Lo que este sistema busca es que los hombres tengan acceso a las mujeres más atractivas y que no puedan ser rechazados. En el fondo todo este planteamiento de Ryan y Jethá no es más que una fantasía sexual masculina.

¿Funcionaría una sociedad igualitaria en lo sexual? Difícilmente, por lo que acabo de comentar y por otra razón que explica Saxon. Aún partiendo de una situación imaginaria donde se comparte el cuidado paterno y la inversión paternal y los hijos se crían comunalmente, bastaría con que los genes de un hombre sesgaran sus recursos hacia la descendencia de la madre que sesgara sus relaciones sexuales hacia ese hombre para que esos genes se extendieran y desplazaran a sus alternativas. Todo el sistema se vendría abajo.

Habría muchísimos aspectos que comentar pero voy a añadir solo uno más, que no lo comenta Saxon. Si nuestra naturaleza fuera la que dicen Ryan y Jethá, entonces no pinta nada que tengamos una emoción como el enamoramiento. Una de las características del enamoramiento es que nos dirige hacia una persona en concreto, que toma un sentido especial, como decía Romeo: “Julieta es el sol”. La mayoría de las personas no pueden sentir la pasión del enamoramiento por más de una persona al mismo tiempo. En un estudio que hizo Helen Fisher del que informa en su libro Why We Love, el 79% de los hombres y el 87% de las mujeres dijeron que no irían a una cita romántica si su amado/a no estuviera disponible. Una cosa es lo que decimos y otra lo que hacemos, pero si de verdad estás enamorado de una persona tu mente se centra en esa persona día y noche, de lo contrario es que no está enamorado. No estoy diciendo que no podamos querer a dos personas al mismo tiempo, que lo natural es la monogamia ni nada por el estilo. Además el enamoramiento según los autores dura entre 12 y 18 meses y luego pasa lo que pasa. Lo único que estoy diciendo es que en una sociedad como la que imaginan Ryan y Jethá no tiene ningún sentido que aparezca una emoción que dirige a dos personas la una hacia la otra para formar un vínculo especial. Por que el argumento de Ryan y Jethá es precisamente que no existen vínculos especiales y que todos somos iguales.

Resumiendo, recomiendo sexo al anochecer y que os olvidéis del sexo al amanecer. Sex at Dusk es un pedazo de libro, un libro muy sólido. Si buscas un buen libro sobre biología evolucionista y sexo en el que puedas aprender cantidad de cosas, Sex at Dusk es tu libro.

@pitiklinov en Twitter

Referencia


17 comentarios:

Anónimo dijo...

Hola, todavía no leí todo. No hay un error?
"Sex at Dusk es un impresentable folletín sin pies ni cabeza escrito por Christopher Ryan, psicólogo, y Cacilda Jethá, psiquiatra, " no se refiere a Sex at Dawn?

Ryan tiene una historia de vida interesante, bastante aventurero, lo escuché creo que acá:
http://www.askbryan.com/thepodcast/48

Anónimo dijo...

La autora tiene una cuenta en goodreads
http://www.goodreads.com/author/show/6494553.Lynn_Saxon

MOVERME MIENTRAS PUEDA dijo...

Podrías hacer referencia a algunos textos de referencia en castellano. Gracias.

Pitiklinov dijo...

Gracias, Gabriel, con tanto parecido al final me he liado. Ya lo he corregido

Pitiklinov dijo...

procuraré hacerlo Carlos, pero uno de los objetivos que me he propuesto con este blog es dar a conocer libros que probablemente no se traducirán nunca al castellano para que los lectores sepan que existen y aproximadamente de qué van.
Pero intentaré siempre que pueda, en enlaces y demás, buscar referencias en español. Gracias por tu comentario.

Unknown dijo...

Despues de leerl este libro de Christopher ryan ademas de escuchar su podcast creo que solo estas juzgando el libro porque no te agradaron sus ideas, es cierto que no se puede estar de acuerdo en todo como en eso de los celos. obviamente es un sentimiento que cuando la persona lo padece no lo puede controlar, pero en una entrevista que christopher ryan le hizo a un experto en seo llamado Mark Gordon tocaron un tema muy importante: ellos dijeron que todo es cuestion de saber escojer como pareja a alguien de tu misma especie. ( poligamo, biseual homosexual etc.) y definitivamente eso de la monogamia es algo cultural ya que cuando una persona no siente plenitud aun casado y amando a la pareja resulta que todo ese tiempo esta persona a estado evitando sus sentimientos, ya sea poligamia, bisexualidad etc.
y claro es mucho mas complicado si tu pareja es monogama, siempre va a haber un conflicto de intereses si no se adapta a tu estilo de vida y tu no te puedes adaptar al estilo de vida de ella.
asi que no creo que el trata de convertir a todo el mundo en poligamos pero si explica porque aun amando a tu pareja simplemente no puedes mantener una sola relacion por mas que te aferres a evitarlo

Anónimo dijo...

¿Como se explica entonces la infidelidad presente en ambos géneros? podemos estar de acuerdo o no sobre el punto de vista del Sr. Ryan a final de cuentas es un libro y cualquier estrategia de mercadotecnia que aumente las ventas es precisamente eso.
Sería muy interesante conocer la tesis doctoral del Sr. Ryan para entonces si dar una opinión más objetiva sobre sus argumentos.

Pero lo que si no se puede ocultar es la infidelidad presente desde tiempos antiguos y que la monogamia busca dar protección legal a los hijos pero no cambia la naturaleza biológica del deseo sexual.

idea21 dijo...

Hay una cosa que no me queda clara acerca del "mate guarding" que a simple vista tiene mucho sentido a nivel evolutivo. Y es que existen antropólogos y "arqueólogos cognitivos" (como Peter Watson) que sostienen lo siguiente (tal como aparece en Wikipedia):

"La antropología ha revelado que la conexión entre sexo y procreación no estaba clara en ciertas sociedades, por lo que se admite que en las primeras culturas humanas esta conexión pasó inicialmente inadvertida. Sin embargo, en la mayoría de sociedades de cazadores-recolectores, el vínculo es conocido. El conocimiento culturalmente añadido de la conexión entre sexo y procreación habría estado relacionado con el concepto socialmente construido de adulterio ni siquiera se considera un móvil legítimo de maltrato. Este descubrimiento constituye un hito importante, porque en ninguna otra especie la actividad sexual está tan desconectada del acto generativo en sí. Este descubrimiento originó la subordinación forzosa de los intereses reproductivos femeninos a los masculinos"

Según Watson y otros autores, el descubrimiento del vínculo entre sexo y paternidad habría sido el antecedente del "pecado original" (al que luego se le atribuyeron muchas más cosas). Por supuesto, los animales machos que se muestran "celosos" de sus hembras, que no quieren que otros machos las inseminen, y que además matan a las crías inseminadas por otros machos, no necesitan "saber", puesto que los animales no "saben" nada, y obran instintivamente. Pero a ver qué pudo suceder en la prehistoria a este respecto, porque si se daba el "mate guarding" ¿cómo no iban a racionalizarlo al comportarse posesivamente y matar a los niños de los que no fueran padres?

La señora Helen Fisher defiende el "matrimonio sucesivo". Eso está muy bien, pero las expectativas a las que las parejas van al matrimonio solo contemplan el "matrimonio sucesivo" a modo de chiste. Sin idea "romántica" de fidelidad hasta "envejecer juntos" no estaríamos hablando de matrimonio, sino de otra cosa.

Pitiklinov dijo...

La infidelidad tiene explicaciones diferentes para cada sexo. Los costes de las relaciones sexuales son diferentes para cada sexo y sus estrategias son diferentes. Además, la sexualidad humana es muy flexible y se adapta al ambiente. Por ejemplo, una mujer puede ser infiel para conseguir recursos (regalos o dinero...) del hombre que no es su marido y le ayuden a criar sus hijos. También puede ser infiel para conseguir buenos genes, mejores que los de su marido. También puede ser una estrategia de diversificación, es decir de no poner "todos los huevos en la misma cesta", si tu marido tiene una enfermedad hereditaria todos los hijos la tendrían, si tienes hijos con diferentes hombres diversificas el riesgo. Una mujer puede tener relaciones exrtramatrimoniales para hacer un daño emocional a su marido o para provocar una reacción por su parte, incluido un divorcio, etc., etc.
De todos modos, la situación "natural" en cazadores-recolectores que reconocen la mayoría de autores es la de monogamia seriada, es decir, las parejas estaban juntas unos años ( 4-7) y cambiaban de pareja y tenían nuevos hijos con ella. Pero siempre han existido las relaciones fuera de la pareja y con diferente tolerancia según las culturas.

guaimus dijo...

lei el libro y no dice que hay que cambiar todo y volver a tener sexo como era en las cavernas. Sólo INTENTA dar un Insight en los orígenes de la sexualidad humana haciendo paralelos con nuestros parientes cercanos en evolución y dando ejemplos de como era la sexualidad en pueblos humanos primitivos.
Indicando que los conceptos de paternidad y monogamia están correctos dentro de la sociedad hiperconcentrada en la que vivimos pero que no siempre fue asi.
En todo caso es un ensayo y no intenta ser concluyente.

Anónimo dijo...

Estoy en un todo de acuerdo con tu explicación de los hechos DJ Blare. dado que debemos manejarnos con lo que es y no con lo que nosotros deseamos que debiera ser, y objetivamente realizado el estudio, concuerdo contigo y con los estudios realizados por Ryan y Jethá. Muchas gracias por la buena disposición de todos al tratar un tema tan importante en nuestra vida y su evolución.

Unknown dijo...

Una mujer no puede ser infiel simplemente porque quiere sexo diferente? Probar algo nuevo...digamos.

Pitiklinov dijo...

Hola Alexandra,
claro que es posible lo que dices, por supuesto. Pero yo hablaba de causas últimas, lo que tú planteas es una causa próxima:
http://ilevolucionista.blogspot.com.es/2013/10/las-cuatro-preguntas-de-tinbergen.html
Saludos

Anónimo dijo...

"Sex at Dawn es un impresentable folletín sin pies ni cabeza[…]",

"Yo no he podido pasar del segundo capítulo."

¿¿¿???

Anónimo dijo...

Hola!!

No encuentro ninguna referencia del libro "sex at dusk" en castellano.

Pitiklinov dijo...

es que no creo que está traducido

Tesa dijo...

No sé cómo puedes hacer una crítica tan feroz de un libro al que solo le has dado dos capítulos de oportunidad...

Me parece bastante tendencioso la verdad...